Hotel Chalet Suizo en Viña del Mar

Me he hospedado 2 veces ahí, la primera vez nada que decir, pero la segunda vez, quedé muy disconforme con el servicio, nos entregaron una habitación, que se notó qué no la habían revisado antes, faltaban las fundas de las almohadas, la luz del baño no encendía, el shower de la ducha, al correrla para entrar a bañarse se le salia la puerta. Por otra parte en la habitación de mi familia, dejaron el jabón encima del vanitorio, sin jabonera, se pegaba ahí mismo, no reponian Confort y pocas veces toalla de mano. Tambien deberían pensar en hacer más inclusivo el lugar, más adaptado a las personas con discapacidad. Lo único que mejoraron fue el desayuno

Reserve para ir en enero, las fotos son engañosas, nada que ver a lo que muestran, el hotel está desmejorado, es en un xalle sin salida. Ya que es la entrada al teleferico que la vía pasa por ka puerta del hotel, es por escaleras una puerta que casi ni se ve

El lugar es bien pintoresco y lindo, pero en general tiene olor a humedad, me imagino que es un tema del tipo de construcción. Lo que le destruyó fue la señora mayor que atiende, la cual espera a que seas adivino, y el desayuno, que te traen una allulla con jamón y si eres vegetariano, la única opción es pan solo, ni siquiera tienen mantequilla para ofrecerte.

El hotel cumple sus funciones, si bien está alejado de las playas es una buena ubicación esta cerca de varios restaurantes o sitios de comida rápida, el agua cuesta un poco que salga caliente, el desayuno no es malo pero se podrías esforzar un poco mas, y arreglen el seguro de las puertas la del baño la pueden abrir con el dedo cuidado con eso, pero por lo demás esta muy bien las piezas son buenas y son cómodas

Excelente servicio, personal muy amable. He disfrutado del encanto viñamarino, en especial de la arquitectura histórica del hotel. Al lado del hotel hay un funicular. Dormitorios espaciosos. Excelente ubicación a pasos del centro de Viña.

El hotel te ofrece la experiencia de revivir las vacaciones de tu infancia volviendo a hospedar en la casa de tu abuela, en un clima cálido y familiar. El hotel está cerca del metro y de la playa. Súper recomiendo pasar las vacaciones ahí.

La ubicacion es lejos de la playa, y de una que no es linda, en un sector con una calle fea, nos dio miedo bajarnos en la noche alli. Las habitaciones no tienen ventana, son muy encerradas y todo muy viejo. El desayuno igual siempre, feo y sin nada de gracia... La señoras son queridas pero no saben de servicio al cliente, en teoria no me debian cobrar IVA por ser extranjera y me lo cobraron igual, aunque les dije despues y ellas sabian que era extranjera, no hicieron nada para reversar esto. Otros amigos se quedaron mas cerca a la playa y mucho mas economico ademas de lindo. No lo recomiendo y no volveria.

Hotel muy lindo, ubicado en un pasaje tranquilo, no se escuchan ruidos durante la noche. Habitación de buen tamaño, cama cómoda, baño amplio. Faltan ventanas en la habitación y mayor ventilación en el baño. No había agua caliente cuando me quedé y el agua sale bastante fría. Desayuno rico y la atención del personal fue muy amable y cálida. Podría considerar volver.