Gral. Baquedano 872, 5952146 Coyhaique, Aysén, Chile
Excelente experiencia en Hostel Aldea Patagonia, ambiente tranquilo, respetuoso, cocina grande, su decoración es todo un arte, te invita a compartir y a disfrutar de tu estadía, los administradores muy acogedores y solucionar cualquier duda con muy buena disposición. Tienen un lugar para tomarse un té, café o compartir un mate Hay espacio para ciclistas, camping y motor home
Tienen normas extrañas en el hostal, horarios de llegada y de duchas que no se ajustan con los itinerarios de la ciudad. Es lindo el lugar y está bien ubicado, pero creo que si mejoraran servicio sería mucho más destacable.
Mala experiencia. Llegamos y nos indicaron horarios: - La ducha sólo se puede usar entre las 05:00 y las 23:00 hrs. Un tour nos pasó a buscar a las 05:00 y el día anterior salimos a comer algo. Literal: tuvimos que correr para alcanzar a ducharnos. - No entregan llaves y ponen horarios de llegada. Francamente parece un internado. - Y lo peor es que cuando llegamos, la persona que nos recibió nos dijo: acá tenemos un lugar para comer y beber porque el fin de semana Coyhaique muere, está todo cerrado. Si nosotros no conocemos: confiamos. Pero resulta que es MENTIRA. Hay varios lugares abiertos para salir a comer o beber algo rico.
Un hermoso lugar con excelente atención. Muy limpio todo , cocina bien equipada y bien calefaccionado. Tiene buena ubicación y vistas hermosas de las habitaciones. Además el wifi funciona bien y prestan otros servicios como arriendo de bicicletas y vehículo de acercamiento a ciertos lugares. Me quedé una semana y sin duda volvería. Gracias a la sra Alejandra por la buena atención y hostilidad.
Me sorprendió mucho este hostel, la cocina es enorme , ordenada y súper completa. Las habitaciones muy amplias y los baños con agua caliente y muy limpios. El personal muy amable y dispuesto a ayudar para hacer tu viaje ameno. Muy recomendado.
Muy recomendado, piezas limpias, acogedoras, baño compartido amplio, equipado con una cocina hermosa, hay de todo para cocinarse y comer, un refri compartido, mesitas de comedor adentro y afuera, juegos de mesa. Los anfitriones muy simpaticos y con buena disposición. Tambien hay servicio de arriendo de autos económico y arriendo de bicis con aporte voluntario, lo que recomiendo mucho para recorrer la ciudad, alrededores y visitar el museo que queda cerca del hostal. Muy buena ubicación, no se siente tan céntrico pero caminando en unos 5 min estás en la plaza principal.
Después de tantos kilómetros de viaje se agradece llegar a un lugar cómodo y con maravillosa atención, es un proyecto que está iniciando pero seguro será un destino ideal para descansar para quienes están haciendo la carretera austral tanto para alguien que viaja solo o en familia que es nuestro caso. Totalmente recomendable, no tienes que pensar en que algo puede faltar porque pensaron en todo lo que puedas necesitar.
El mejor hostel con el que nos hemos encontrado en la patagonia. Los trabajadores son muy amables y buena onda. Se genera el espacio para conocer a las personas hay juegos de mesa y también en el patio. La cocina tiene de todo para preparar tus comidas. El lugar es seguro y tiene espacio para estacionar. El hostel es grande y tiene literalmente de todo! Mil gracias por la estadía allí además nos llevamos amigos de otras culturas, un ambiente genial!